El Banco Central del Ecuador prevé un escenario económico para el próximo cuatrienio, con una economía “frenada”…
¿Economía en transición?
Por José Samaniego Ponce
El Banco Central del Ecuador prevé un escenario económico para el próximo cuatrienio, con una economía “frenada”, “estancada”, de muy lento crecimiento, un escenario de una economía que se reacomoda a un cambio en el modelo de producción. Esa conclusión se deriva de la información que esa institución presentó a la ciudadanía el pasado 17 de agosto bajo el título Previsiones Económicas del Ecuador 2017 – 2020.
Desde el lado de la demanda agregada, el programa pretende modificar la estructura de la inversión, promoviendo a la originada en el sector privado (extranjero y nacional), mientras que reduce paulatinamente el peso de la inversión pública, que fue el motor del crecimiento en el gobierno de Correa.
El consumo de los hogares, el principal determinante del crecimiento económico en el Ecuador, luego de una caída proyectada para el 2017, se irá recuperando lentamente hasta el 2020. Según el Banco Central, las exportaciones no petroleras, serán otro eje fundamental del crecimiento, al igual que la minería y la construcción de vivienda popular.
Algunos analistas como Cordes y el Observatorio de la Política Fiscal han encontrado algunas inconsistencias entre las proyecciones económicas del Banco Central y la proforma presupuestaria presentada a la Asamblea Nacional por el ministerio de Finanzas, que se traducirían en un escenario macroeconómica bastante más pesimista. En ese mismo sentido se apuntan las estimaciones de los organismos internacionales, FMI y Banco Mundial, que prevén tasas negativas de crecimiento de la producción en el país hasta el año 2020.
Sin perspectivas de un aumento en el precio del petróleo en el corto plazo, la clave de la dinámica del crecimiento económico en los próximos años serán el financiamiento externo y la inversión privada.
Como han sugerido varios analistas, el cambio de modelo debería ser gradual para evitar efectos traumáticos en la economía, el empleo y en la distribución del ingreso, pero tiene el costo de que el ajuste se extienda demasiado en el tiempo. Esto requiere decisiones inmediatas que deberían anunciarse muy pronto y un esfuerzo legislativo de mediano plazo para desmontar el marco jurídico que se creó en el anterior gobierno.
Las proyecciones presentadas solo son eso, proyecciones estadísticas. Aun no hay una presentación formal del modelo económico que se quiere seguir y de las medidas que se requieren para implantar dicho modelo.