Con este son 5 meses consecutivos, desde septiembre del 2017, que la inflación interanual es negativa.
Deflación: debe preocuparnos?
Por JOSE SAMANIEGO PONCE
Estamos a las puertas de una deflación?… Ese fue el título de un análisis de la versión digital de la revista Gestión que circuló el pasado 7 de febrero, un día después que el INEC publicó el resultado de la medición de la inflación correspondiente al mes de enero: -0,09.
Con este son 5 meses consecutivos, desde septiembre del 2017, que la inflación interanual es negativa. La pregunta del análisis en referencia es válida porque la gerente general del Banco Central, Verónica Artola, mencionó que de acuerdo con los parámetros técnicos del FMI, si la economía tiene variaciones anuales negativas por al menos seis meses seguidos, una economía se encuentra técnicamente en deflación y eso puede suceder en febrero. El cuadro inferior, tomado del Diario el Universo, ilustra en comportamiento de la inflación en los últimos meses.
La historia económica ecuatoriana registra algunos eventos de deflación, pero el más importante se dio en la década de los 30, producto de la gran crisis internacional y la disminución de los precios de nuestros principales productos de exportación. Como el país vivía bajo el régimen del patrón oro, el país enfrentó una reducción de reservas internacionales y del circulante doméstico que contrajo la demanda y generó una caída de precios.
Un período de deflación prolongado, tiene muchos efectos nocivos para una economía y si no, pregunten a los japoneses. La disminución generalizada de los precios reduce el consumo y principalmente la inversión, lo que genera estancamiento económico en el corto plazo y caída del empleo. La deflación tiene también impactos directos en la tasa de interés real y puede impactar en la solidez del sistema financiero.
También tiene sus aspectos positivos y el principal es que mejora la competitividad externa de los productos domésticos, lo cual promueve el crecimiento de las exportaciones y el turismo receptivo.
Debemos realizar un seguimiento muy cercano de este indicador en los próximos meses, para determinar si se consolida este proceso, por muchos años ausente de la economía nacional; y si lo hace, habrá que pensar en la forma de enfrentarlo. Otro reto para el gobierno nacional.